Nissan Motor, cuya situación financiera continúa deteriorándose, ha decidido llevar a cabo una reducción adicional de personal que supera las 10,000 personas tanto en Japón como en el extranjero, como parte de su plan para reconstruir la gestión. Sumado a los planes anteriores, esto implicará una reducción de alrededor de 20,000 empleados en todo el grupo, lo que equivale aproximadamente al 15% de la plantilla total.
Se espera que el resultado financiero del último año fiscal de Nissan registre una pérdida neta máxima de hasta 750 mil millones de yenes, manteniendo una situación de gestión difícil.
En noviembre pasado, la empresa ya había anunciado un plan para reducir su capacidad de producción mundial en un 20% y recortar 9,000 empleados como parte de la reestructuración. Sin embargo, según fuentes relacionadas, debido a que las ventas han caído más de lo previsto, se ha decidido realizar una reducción adicional de aproximadamente 11,000 empleados en el país y en el extranjero. Esto llevará la reducción total a cerca del 15% de la fuerza laboral del grupo.
Además, Nissan anunció el día 9 de este mes que abandonará el plan para construir una planta de producción de baterías para vehículos eléctricos (EV) en la ciudad de Kitakyushu. La compañía también ha indicado que cerrará tres plantas, incluyendo una en Tailandia, y junto con la reducción de personal, revisará su estructura de producción excesiva.
Se espera que Nissan revele estos planes en la conferencia de resultados de hoy.
Frente a un entorno empresarial aún más difícil debido a las medidas arancelarias del gobierno de Trump en Estados Unidos, la atención se centra en si la nueva administración, encabezada por el presidente Iván Espinosa, quien asumió en abril, podrá llevar a cabo una reestructuración radical de la gestión.
Resumen: NHK
Link de la noticia: AQUI