Una mujer mongola de 36 años fue arrestada por la policía en el templo Sensoji de Tokio, tras robar la cartera de una turista estadounidense de 81 años.
El incidente ocurrió el 9 de abril alrededor de la 1:30 de la tarde, cuando la mujer se acercó desde atrás a la anciana mientras esta se lavaba las manos en el chozuya, el lugar donde los visitantes purifican simbólicamente sus manos antes de entrar al templo.
La mujer utilizó una chaqueta para ocultar sus manos y, al acercarse lo suficiente, sustrajo la cartera de la bolsa de hombro de la turista, que contenía aproximadamente 10,000 yenes (67 dólares).
Tres días antes, se había reportado otro caso de un turista extranjero siendo víctima de un robo similar, lo que llevó a la policía a estar alerta.
La mujer mongola, que había llegado a Japón una semana antes con una visa de corta duración, niega los cargos, afirmando que estaba tratando de evitar que la cartera cayera al suelo. Sin embargo, su versión no resulta convincente.
