En un contexto de incertidumbre sobre la defensa de Japón por parte de Estados Unidos, se ha informado que la administración Trump está considerando una reducción de presupuesto de aproximadamente 160 mil millones de yenes para el fortalecimiento de las tropas estadounidenses en Japón.
Durante un reciente encuentro entre Trump y el Primer Ministro japonés, Shigeru Ishiba, se reafirmó que el artículo 5 del tratado de seguridad entre Japón y Estados Unidos se aplicaría a las islas Senkaku.
Sin embargo, Trump expresó su descontento con el tratado, afirmando que Estados Unidos debe defender a Japón, pero que Japón no tiene la obligación de defender a Estados Unidos. Este cambio en la postura ha generado preocupación entre los expertos políticos, quienes sugieren que Trump prioriza las necesidades de los votantes estadounidenses sobre las obligaciones de defensa internacional.
La reducción del presupuesto podría afectar la nueva “Comandancia Conjunta” establecida por la administración Biden, que busca fortalecer la cooperación con las Fuerzas de Autodefensa de Japón.
Dos congresistas republicanos han advertido sobre el riesgo de que una reestructuración significativa de las fuerzas estadounidenses se lleve a cabo sin la cooperación del Congreso, lo que podría debilitar la posición de Estados Unidos en negociaciones con naciones adversarias.