Por la noche del día 27, en un departamento ubicado en el distrito de Naniwa-ku, ciudad de Osaka, una mujer rusa, Elena Ito (50 años) fue hallada yacente en su cama.
La halló su esposo, también ruso, quien vive separado de ella. La halló en ese estado al visitarla y un conocido de ambos llamó a la policía.
En el rostro de Itō se observaron múltiples marcas que parecían haber sido causadas por golpes, y se confirmó su muerte en el lugar.
El esposo llegó al departamento porque no había podido comunicarse con ella durante varios días. No había señales de que la habitación hubiera sida saqueada. El esposo explicó a la policía que la puerta estaba cerrada con llave. La policía continúa investigación.