El Gobierno japonés redoblará sus esfuerzos para garantizar que los residentes extranjeros se inscriban en el programa público de pensiones del país accediendo a la información pertinente durante el proceso de migración, según informaron fuentes cercanas gobierno.
Todos los residentes extranjeros en Japón están obligados a inscribirse en el servicio de pensiones, ya sea a través del auto-registro mediante la presentación de una solicitud o el registro del empleador. Sin embargo, algunos casos siguen escapando al sistema.
A partir de octubre, el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar planea actualizar el sistema del Servicio de Pensiones de Japón para obtener datos una vez que un extranjero se muda a Japón, dijeron las fuentes.
Si un residente extranjero aún no se ha inscrito en el sistema, el ministerio enviará primero una carta solicitándole que se inscriba, y si no se toma ninguna medida, tendrá la autoridad para inscribir a la persona, según las fuentes.
La medida pretende garantizar que todos los residentes extranjeros en Japón paguen las primas del seguro y tengan derecho a las prestaciones de la seguridad social.
Todas las personas de entre 20 y 59 años con domicilio en Japón deben inscribirse en el sistema de pensiones del país, independientemente de su nacionalidad. Una vez inscritos, tendrán derecho a cobrar la pensión a partir de los 65 años.