En la región de Kanto, especialmente en las prefecturas de Shizuoka y Kanagawa, se ha observado un fenómeno conocido como “halo de polen”. Este fenómeno ocurre cuando la luz solar se curva debido a pequeñas partículas como el polen, y se manifiesta en días soleados con alta concentración de polen, indicando el inicio de la temporada de polen.
Con la llegada de la primavera, las temperaturas en Tokio han superado los 18 °C, acercándose a las condiciones típicas de la floración de los cerezos. Sin embargo, esto también ha traído consigo un aumento en las preocupaciones por las alergias al polen.
Los ciudadanos han comenzado a notar los efectos. Algunos mencionan que ya sienten la presencia del polen, experimentando molestias como picazón en los ojos y congestión nasal. Según Weather News, ayer, Tokio entró oficialmente en la temporada alta de polen, y se pronostica que la dispersión del polen se amplíe en las próximas semanas.
Las clínicas en Tokio han reportado un aumento significativo en el número de pacientes con alergias al polen, con un incremento casi del doble en comparación con la semana anterior. El director de la Clínica Keiyu Ginza, Toshihiko Oba, comentó que el clima cálido ha llevado a un aumento en las visitas, ya que más personas abren ventanas y realizan actividades al aire libre.
Además, se estima que las pérdidas económicas relacionadas con las alergias al polen ascienden a aproximadamente 232 mil millones de yenes diarios. Ante este desafío, la empresa Ocean ha implementado una nueva medida: el “bono por alergia al polen”. Esta iniciativa permite que los empleados que reporten su alergia reciban el reembolso total de los gastos médicos relacionados hasta cuatro veces al año.
Una mujer que ya ha utilizado este bono mencionó que ha sido útil para manejar sus síntomas, especialmente en un contexto donde los síntomas podrían confundirse con los del COVID-19 o un resfriado.
El presidente de la empresa Ocean, Kufu Taniguchi, destacó que la implementación de este bono busca reducir el ausentismo laboral debido a las alergias al polen, lo cual es crucial en un momento de escasez de personal.