Una prisión de Aichi que se enfrenta a denuncias de agresiones y abusos verbales por parte del personal penitenciario contra los reclusos comenzó un ensayo para utilizar el sufijo honorífico “-san” al dirigirse a los presos informa el diario Mainichi.
La medida incorpora medidas del Ministerio de Justicia anunciadas en junio para abordar el problema.
Entre noviembre de 2021 y septiembre de 2022, 22 jóvenes guardias de la prisión de Nagoya habrían agredido y maltratado a tres reclusos de entre 40 y 60 años en un total de 419 ocasiones.
Un grupo de expertos independiente concluyó que la práctica del personal de la prisión de referirse a los reclusos con términos como “convicto” o “yatsura” -una forma tosca y despectiva- reflejaba “una escasa conciencia de los derechos humanos”. El grupo aconsejó que se abandonaran las formas de dirigirse a los reclusos que conducen a una relación jerárquica, al tiempo que pidió que se revisara la forma de dirigirse a los presos por su nombre aunque sin el sufijo cortés “-san”.
En respuesta, el Ministerio de Justicia dio a conocer medidas para evitar que se repitieran los abusos, entre ellas prohibir inmediatamente usar denominaciones despectivas a los reclusos y considerar una revisión de dirigirse a ellos sin “-san”. El objetivo era cambiar el excesivo énfasis estructural en la disciplina y el orden, y el ministerio está viendo si las medidas arraigan en la forma correccional para eliminar el problema.
Según una fuente cercana al asunto, la prisión de Nagoya tiene un cierto número de reclusos con antecedentes en el crimen organizado, por lo que algunos expertos temen que surhjan dificultades para mantener la disciplina. Sin embargo, a las reclusas de las cárceles de mujeres de todo el país ya se les dirige con el sufijo cortés san, y la conflictiva prisión de Nagoya comenzó a probar la misma práctica desde agosto (usando san) para tratar de forma proactiva el problema de los abusos.
Aunque aparentemente no han surgido problemas graves, varias reclusas que se habían acostumbrado a la forma anterior de dirigirse a ellas se sienten “avergonzadas de alguna manera” cuando se les llama usando “san”.
El Ministerio de Justicia está revisando el trato de los reclusos en las prisiones antes de la introducción de nuevas penas orientadas a la rehabilitación, que unificarán las anteriores formas de encarcelamiento del país con y sin trabajo a partir de 2025. El ministerio planea celebrar debates en cada centro en los próximos tres años para resumir las opiniones sobre cómo tratar a los presos.
Resumen: Mainichi
Link de la noticia: AQUI