Ayer, el centro de Tokio se convirtió en un mar de colores cuando miles de personas acudieron al desfile anual del Rainbow Pride (Orgullo Arco Iris). Los manifestantes pidieron más avances hacia la igualdad de derechos para las personas LGBTQ en Japón.
La multitud llenó las calles del céntrico distrito de Shibuya. Según los organizadores, participaron unas 10.000 personas, algunas de ellas del extranjero.
Entre los participantes había muchos jóvenes que vestían ropas coloridas y llevaban pancartas con los colores del arco iris que representaban la diversidad.
Una manifestante que se hace llamar Lily dijo: “Espero que todos los que estáis hoy aquí disfrutéis siendo quienes sois y mostrando vuestros propios colores”.
Una estudiante universitaria que usa el nombre de Sakura dijo: “Creo que Japón también será más abierto en un futuro próximo en el reconocimiento de la diversidad, como permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo”.
Un hombre que deseaba ser identificado sólo por su nombre de pila, Daiki, dijo: “Quiero decirle a la gente de todo el mundo que puedes ser quien eres y que siempre hay comunidades a tu alrededor para apoyarte.”
Los legisladores japoneses han estado intentando tramitar por la vía rápida un proyecto de ley para promover la comprensión de las personas LGBTQ, pero los debates se han visto paralizados por algunos miembros del principal partido gobernante.
Japón es el único país del Grupo de los 7 que no reconoce legalmente los matrimonios o uniones civiles entre personas del mismo sexo.
El gobierno recibe cada vez más presiones para que haga más por la comunidad LGBTQ.
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