Los montañeros que suban al Fuji desde la prefectura de Yamanashi tendrán que pagar una tasa extra.
La asamblea local ha promulgado una ordenanza que obligará a los escaladores que suban al monte Fuji desde la prefectura de Yamanashi a pagar una tasa extra.
Entrará en vigor el 1 de julio, cuando comience la temporada de escalada.
La asamblea de la prefectura de Yamanashi promulgó este lunes por unanimidad la ordenanza destinada a proteger el medio ambiente y prevenir accidentes.
La medida se produce cuando el número de excursionistas al pico más alto de Japón se recuperó el año pasado hasta casi los niveles anteriores a la pandemia. Algunos han comenzado el ascenso por la noche y descienden sin alojarse en refugios, lo que se considera imprudente.
Los funcionarios de la prefectura habían presentado un borrador de la ordenanza señalando la necesidad de regular a los escaladores. La medida obliga a los excursionistas a pagar una tasa de 2.000 yenes, unos 13 dólares por persona, cuando recorran el sendero Yoshida del monte Fuji, situado en la prefectura.
La medida también contempla la instalación de una verja en la quinta estación de la montaña y el establecimiento de un límite en el número de excursionistas que pueden pasar por ella en un día determinado.
La ordenanza también permite al personal de seguridad desplegado a lo largo del sendero emitir advertencias a las personas que se comporten de forma inadecuada.
Como a las personas que suben desde el lado de Yamanashi ya se les pide que paguen voluntariamente 1.000 yenes, o unos 6,6 dólares, se espera que paguen hasta 3.000 yenes, o casi 20 dólares, para subir al monte Fuji.
Resumen: NHK
Link de la noticia: AQUI
[wp-stealth-ads rows=”2″ mobile-rows=”3″]