Tomoko Akane, jueza de la Corte Penal Internacional, ha sido elegida presidenta, convirtiéndose así en la primera japonesa que toma el timón del tribunal.
La CPI, con sede en La Haya (Países Bajos), anunció que Akane había sido elegida por votación de sus colegas jueces. Su mandato durará tres años.
Akane es jueza de la CPI desde marzo de 2018. Anteriormente ejerció como fiscal en todo Japón, incluso en la Fiscalía del Distrito de Hakodate y en la Fiscalía Suprema Púbica.
El objetivo de la CPI es juzgar a las personas responsables de atrocidades inhumanas en guerras y conflictos. Se ocupa de delitos graves como el genocidio, los crímenes de guerra y los crímenes contra la humanidad.
El pasado mes de marzo, el tribunal dictó una orden de detención contra el Presidente ruso Vladimir Putin por el traslado de niños de Ucrania a Rusia. Rusia respondió incluyendo a funcionarios de la CPI, entre ellos a Akane, en su lista de personas buscadas.
Akane declaró en un comunicado que “me siento profundamente honrada de haber sido elegida por mis compañeros magistrados. Me centraré en fomentar el diálogo entre los órganos de la Corte y los representantes de la defensa y de las víctimas, así como en reforzar el diálogo con los Estados Partes y los Estados que aún no han ratificado el Estatuto de Roma“, declaró.
Resumen: NHK
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