El mercado de divisas ha experimentado un rápido debilitamiento del yen, alcanzando temporalmente, por primera vez en aproximadamente cinco meses, el nivel de 157 yenes por dólar, algo que no se veía desde finales de julio.
Hoy, el Banco de Japón decidió no aumentar las tasas de interés, y durante la conferencia de prensa, el gobernador Ueda no hizo comentarios contundentes sobre un posible aumento.
Esto ha llevado a que se tome en cuenta la diferencia de tasas de interés entre Japón y Estados Unidos, lo que ha intensificado la tendencia de vender yenes y comprar dólares.