El Nikkei cerró ayer en baja por primera vez en cinco sesiones, retrocediendo 215 puntos hasta los 47,734 yenes. En el mercado cambiario, el yen se depreció y llegó momentáneamente a la zona de 153 yenes por dólar, un nivel no visto en unos ocho meses.

La depreciación del yen se ha vinculado a las expectativas de una política fiscal expansiva bajo la nueva pdta. del partido en el gobierno. fenómeno bautizado en los mercados como el “Takaichi Trade”. Sin embargo, expertos advierten que la tendencia no está asegurada.
Hiro-mitsu Kahoku, de Nezu Asia Capital Limited, señaló que dentro del círculo de asesores de Takaichi podría haber quienes, preocupados por la caída del yen, impulsen la necesidad de subidas de tasas; ese tipo de presiones podría frenar la depreciación.

Kahoku también alertó sobre el riesgo de una reversión brusca: si las posiciones favorables a Takaichi se moderan al avanzar hacia medidas más realistas, podría producirse un retorno del yen al alza —un “Takaichi Always Chickens Out”, en alusión al juego de palabras con el “TACO trade” asociado a Trump— que estabilizaría los mercados y revertiría el actual movimiento de ventas de la divisa japonesa.







