Un avión “Boeing 737 MAX” despegó desde las instalaciones de la empresa Boeing en Zhoushan, provincia de Zhejiang, China.
La aeronave se dirigió a Seattle, donde se encuentra la mayor fábrica de Boeing en Estados Unidos, haciendo escala en Guam.
La agencia Reuters señaló que esta aeronave estaba destinada a ser operada por una aerolínea subsidiaria de China Southern Airlines, pero fue devuelta a Estados Unidos sin ser entregada.
En relación con Boeing, medios estadounidenses informaron que las autoridades chinas ordenaron a las aerolíneas no aceptar entregas adicionales de aviones Boeing como represalia a los aranceles de hasta el 145% impuestos durante la administración Trump.
Desde marzo, Boeing había enviado varios aviones 737 MAX desde su fábrica en Seattle a Zhoushan para las etapas finales antes de la entrega a clientes chinos. Sin embargo, debido a la escalada de la guerra comercial y los aranceles recíprocos anunciados por ambos países, las entregas están en pausa.
La guerra comercial ha complicado aún más la recuperación de Boeing tras la crisis del 737 MAX y la pandemia COVID-19. La planta de Zhoushan fue establecida en 2018 para facilitar entregas a China, uno de sus mayores mercados, pero ahora está afectada por estas tensiones.
Se informa que el gobierno chino ha pedido a las aerolíneas chinas que suspendan la compra de piezas de aviones fabricadas en EE.UU., aunque no hay instrucciones oficiales claras en algunos casos. Esto genera incertidumbre y podría retrasar muchas entregas.